Amo a un hombre de torso como tronco de árbol
cuya piel sabe a hierro, a tamarindo y sangre,
que tiene la salvaje prestancia de un verano
y la música ronca de los viejos volcanes.
Amo a un hombre que vino precedido por hojas
tiritando lloviznas bajo un cielo de nácar,
por galopes de ciervos sobre suelos de rosas,
por temblores de briznas y estertores de aguas.
Un hombre que me anuda con los brazos de cinta,
y sajará el jacinto de cristal con que espero,
como la lluvia saja los surcos de las islas,
como la llama hiende lo más débil del cielo.
hola me encantan los modelos que tenes me entere que estas haciendo mas quiero verlas heee besos
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